Puedes pensar que subirte a la bici y salir a pedalear puede ser muy fácil, pero no es tan sencillo como parece. Necesitas saber algunos puntos para poder poder ponerte en forma evitando lesiones y a su vez mejorando el rendimiento.
- TEN OBJETIVOS. Lo primero que tienes que tener claro es que quieres hacer, a dónde dirigir tu entrenamiento, necesitas tener este objetivo bien claro para poder enfocar la energía en conseguirlo. Necesitas marcar objetivos (metas) a corto, mediano y largo plazo (algo que desafíe, algo que no hayas hecho antes y que nos dé motivación para conseguirlo).
- SÉ REALISTA. Ten en cuenta que si ya realizaste ejercicio alguna vez, te será mas fácil retomarlo (aunque hayas aumentado de peso), si es la primera vez que vayas a comenzar un entrenamiento es recomendable que tengas en cuenta lesiones anteriores y comenzar paulatinamente. Evita la frustración.
- TEN CONSTANCIA. El ciclismo es un deporte de constancia, necesitas salir varias veces a la semana (2 o 3 mínimo) para poder ver cambios positivos y sobretodo llegar a las metas propuestas.
- ALIMENTACIÓN. Cuida la forma en la que comes, necesitas alimentarte balanceado para poder nutrir a tu organismo tal como lo necesita. Evita el alcohol, tabaco, bebidas azucaradas, alimentos ultra procesados, comida rápida. Sustituye estos alimentos por frutas y verduras frescas, granos integrales, frutos secos al natural o tostados (no fritos y con sal), huevo. Si tienes dudas, acude a un nutriólogo deportivo.
- ORGANIZA TUS ENTRENAMIENTOS SEMANALES. Que sea progresivo, no te excedas porque no sólo terminarás frustrado, si no que también puedes causarte alguna lesión. Intenta intercalar los entrenamientos pesados con los más leves
- RECUPERACIÓN. Una mala recuperación puede arruinar una planificación. Por eso es importante alimentarse bien y descansar correctamente. Estira terminando cada sesión, al menos inviértele unos 10 minutos. Duerme de 6 a 8 horas.
Recuerda que el ciclismo es algo que tú elegiste, es un deporte que puedes hacer solo o en compañía de tus amigos, así que no olvides disfrutarlo y divertirte en los entrenamientos. Cuando dejamos de pasarlo bien, perdemos la pasión y la motivación necesarias para continuar practicándolo. Cuanto más disfrutes con lo que haces, más querrás seguir haciéndolo.